
-El Arzobispo de Tuxtla señaló que actualmente se vive un contexto marcado por la desigualdad, el abandono y la violencia estructural
Alfredo Pacheco / Bitácora Sur
Tuxtla Gutiérrez.- Luego el hallazgo de más de 700 personas rescatadas en un rancho de Dolores Hidalgo, entre ellas varios chiapanecos, el arzobispo de la capital chiapaneca, Monseñor José Francisco González González, hizo un llamado urgente a la sociedad a no ser indiferente ante la injusticia social y a fomentar la solidaridad, especialmente hacia los más vulnerables como migrantes, indígenas y comunidades empobrecidas.
Durante la conferencia de prensa dominical de la Arquidiócesis de Tuxtla, el arzobispo recordó la parábola del Buen Samaritano para ilustrar la necesidad de “vivir la fraternidad y la solidaridad”, valores fundamentales en un contexto marcado por la desigualdad, el abandono y la violencia estructural.
“La indiferencia y la falta de compromiso con la justicia social son actitudes que abandonan al prójimo”, advirtió Monseñor José Francisco.
Señaló que, aunque la humanidad vive en una era con mayores posibilidades educativas y económicas, persisten actitudes egoístas y xenófobas, incluso entre los propios mexicanos hacia migrantes centroamericanos.
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Monseñor González González también criticó la explotación que sufren los migrantes por parte de redes de trata de personas y “polleros”, quienes se aprovechan de la necesidad de quienes buscan un mejor futuro. “Cuando una persona deja su hogar, lo hace por amor a su familia; sin embargo, en esa búsqueda muchos arriesgan todo”, lamentó.
Sobre los recientes enfrentamientos entre comunidades del mismo municipio en Chiapas, que han derivado en desplazamientos forzados, el arzobispo advirtió que la polarización social y política ha sido alimentada por “grupos de choque” que actúan como cortinas de humo frente a problemáticas estructurales.
“Nos enfrentamos incluso entre comunidades de la misma etnia, ya sea por tierras, religión o política. Lo que necesitamos es educarnos en humanidad. El evangelio no excluye a nadie: construye, une y ama”, dijo para finalizar.